2 Mac 12.42 Y rezaron al Señor para que perdonara totalmente ese pecado a sus compañeros muertos.
2 Mac 12.45 Pero creían firmemente en una valiosa recompensa para los que mueren como creyentes. Esta fue la razón por la cual Judas ofreció este sacrificio
por los muertos; para que fueran perdonados de su pecado.
Mt 5.26 En verdad te digo: no saldrás de allí hasta que hayas pagado hasta el último centavo.
Lc 12.58-59 Aprovecha la caminata para reconciliarte con él, no sea que te entregue ante el juez y el juez te entregue al carcelero, y el carcelero te encierre en la
cárcel. Yo te aseguro que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo.
1 Cor 3.13-15 Un día se verá el trabajo de cada uno. Se hará público el día del juicio, cuando todo sea probado por el fuego. Si lo que has construido resiste el fuego,
serás premiado. Pero si la obra se convierte en cenizas, el obrero tendrá que pagar. Se salvará, pero no sin pasar por el fuego.
A lo largo de nuestra vida cometemos infinidad de pecados, veniales y mortales. El sacramento de la penitencia nos concede el perdón de nuestros pecados confesados, mas siempre queda la culpa por los males cometidos. Precisamente esta culpa es de la cual tenemos que ser purificados, como nos dice la Escritura : no saldremos de esa purificación “hasta pagar el último centavo”.
Un pertinente resumen el que redactas para demostrar que nuestro Señor en su palabra nos da un signo más de su misericordia.
ResponderEliminarY quienes lo temen saben que no pueden pasar a su gloria sin estar completamente limpios. Por ello no solo en la Biblia está fundamentado. También se ha revelado a personas santas que pudieron registrarlo para la posteridad. En este caso menciono a Santa Catalína de Génova, quién pudo escribir un tratado del Purgatorio.
"A través de el Divino fuego con el cual fue purificada en la vida mortal, ella pudo entender el estado de las almas del Purgatorio. Jesús le dijo: "el alma es como el oro, tiene que ser purificada en el fuego."
Le reveló que como el sol no puede penetrar en una superficie cubierta, así, del mismo modo, tampoco la llama de su amor puede penetrar en las almas que se bloquean o se resisten a recibir su amor Purificador, porque Él respeta la libertad del hombre.
El alma que no desea ser purificada en la vida terrena y no encuentra deleite en la purificación, tendrá que padecer una purificación más fuerte en el Purgatorio. Porque aquí en la tierra se halla complacencia y consuelo en el Señor.
Comparto el enlace para ahondar y conocer más de la misericordia de nuestro Señor:
http://www.corazones.org/diccionario/purgatorio_catalina_siena.htm